El mundo es tan injusto que me da asco.
Hay pobreza, guerras, miedo, desilusión, fracaso, indiferencia, injusticias, catástrofes. La gente sufre; a veces es difícil recordar que también pasan cosas buenas y a veces, simplemente, no pasan.
La gente nace, vive, sueña y se va marchitando.
¿Es resignarse pensar que no hay más que eso?
Recuerda: los límites de tu vida los marcas tú.


